lunes, mayo 12, 2008

Sin pasarse rollos



"Tu me das y yo te doy, pero sin hablar de amor"


A partir de un flirteo, pinchazo, jugueteo, affaire, desliz, aventura o como lo quieran llamar, perfectamente puede formarse una parejita que se prolongue en el tiempo, por lo menos más allá del primer encuentro, y ésto no necesariamente tiene que llegar a convertirse en pololeo (o noviazgo, para los lectores extranjeros), sino que queda relegado a los límites de "la buena onda" que pueda existir entre ambas partes...

Pero ¿a quien no le ha pasado que, de esa endeble y a ratos recreativa relación que no pretende ser más que eso, haya surgido un interés de verdad?

Por ejemplo, después de pinchar (Def. Chile/ Pinchar: dícese de darse unos besitos locos con alguien en un encuentro eventual o encuentros esporádicos), y de seguir frecuentándote con esa persona, te das cuenta que te estás involucrando más de lo razonable. ¿Qué haces? ¿te viras antes de que la cosa pase a mayores o sigues en el juego sabiendo que no pasarás más allá de ser "la pareja de turno"?

Acá es importante destacar que no siempre se ponen límites desde un comienzo, por lo cuál, pretender llegar a instancias más estables tiene cierta cabida si pensamos que las grandes historias parten de encuentros más bien light, y ahí hay que darle tiempo al tiempo no más y ver como se va dando la cosa. Las relaciones humanas no son fáciles, y por lo mismo cobra mucha importancia el conocerse en situaciones más cotidianas, extra carrete por cierto. Pero, a veces SI se ponen los límites y la cosa queda clarita, "la vamos a pasar super bien, pero sin hablar de amor". O sea, si uno de los miembros de esta pseudo pareja, se enamora de verdad de otra persona, de un tercero, tiene todo el derecho de jugársela ahí, y poner fin a la aventura que mantenía. Todo quedará en buena onda y la amistad primigenia perdurará.

Peeero... a veces se piensa que los límites están claros, y resulta que en realidad ninguno puso límites, o si se pusieron, pero de forma tácita, nada expresamente claro, se pensó que ambos sabían a lo que iban, y ahí es donde surge el problema, y comienzan los "rollos". Se comienza a invadir terreno del otro y de alguna manera, muchas veces sin quererlo o darse cuenta, se termina ahogando a quien justamente buscaba una relación libre sin mayores problemas ni ataduras.

Sin duda que el tema refleja cierta frivolidad, pero aún queriendo no ser frívolo, se pasa una y otra vez por esta historia, y podemos estar en cualquiera de los dos lados.

"Podemos ser más que amigos, pero sin hablar de amor
Te propongo que vivamos nuestro romance ilegal, pero sin enamorarnos
Aunque suframos los dos, esto es sin hablar de amor"

Hechizo - Romance Ilegal

lunes, mayo 05, 2008

El día del hijo.

Acaba de pasar el Día del Trabajo, y se acerca el Día de la Madre. Luego llegará el del padre, del abuelo, del amigo y el día internacional de la Mujer. Y podemos seguir con el día del amigo, día del profesor, de la enfermera, día del minero, día del Loly, día de la corneta, día de la callampa, día del nepe y cuantos otros.

Es cierto que son oportunidades de oro para los comerciantes, especialmente aquellos que tienen restoranes, pubs, venta de tarjetas de saludos, peluches, etc. Y por mucho que tengamos claro que son fechas "comerciales", igual no queremos ser menos y con algún engañito nos rajamos, porque de alguna u otra forma también son fechas que permiten acercarse un poquito más a los seres queridos.

Pero mi pregunta es:

¿Cuando se va a instaurar el día del hijo?

Ustedes en seguida me dirán "Pero si ya existe el día del niño", y ¡Noo pues!, yo no hablo del día del niño (que no es lo mismo que el día del...), sino que expresamente del día del H I J O.

Sucede que yo saludo (y hago regalos) para el día de la madre y día del padre (corresponde) y algun otro día especial en que valga la pena hacerse el lindolfo, pero yo no recibo regalos nunca, ya dejé de ser niño asi que no me llega nada ese día, tampoco soy padre (y menos madre), entonces, hago regalos a mi sobrino, a mi mamá, a mi papá y a mi no me regalan nunca nada (excepto para el cumpleaños y la navidad, pero ahí todo mundo recibe regalos ¿n0?).

Asi es que mi campaña personal comienza hoy: Exijo el día del hijo, porque es justo y necesario. Y quiero mis regalos con efecto retroactivo por todos los años que tienen en deuda. ¿materialista yo? Para nada, lo justo es justol. He dicho.