domingo, abril 22, 2007

Sólo por divagar

Me parece que el escepticismo es una manera de vivir la vida y evitar lamentaciones. Es casi como decir que la frase "mejor prevenir que curar" es una filosofía de vida y que desenvolverse bajo ese precepto asegura una sana manera de enfrentar el día a día.

Cuando digo que se pueden evitar lamentaciones, es simplemente por el hecho de que las desilusiones siempre vienen acompañadas de algún grado de lamentación o sufrimiento. Darse cuenta de que las cosas no son como se espera, o que las personas no son como se muestran produce esa sensación de desilusión, y ahí es donde el escepticismo se alza como estandarte y escudo.

Si veo en el cielo un objeto luminoso que realiza extraños movimientos podría pensar que es un ovni, un platillo volador, un nave tripulada con seres de otro planeta. Pero luego de que los expertos analicen las imágenes fotográficas o de video de ese objeto, se concluirá que es un volantín iluminado por las luces de la ciudad. Todas las expectativas hechas respecto a la vida en otros planetas se derrumba como castillo de arena y aparece la desilusión.

Si ese ejemplo lo llevamos a la vida diaria, el efecto es el mismo. No creer es mejor. No creer en algo o alguien evita que la caída sea tan brusca y dolorosa, porque vamos a encontrarnos con muchas "luces de colores que realizan extraños y llamativos movimientos" pero que a final de cuentas sólo serán volantines iluminados por las luces de la ciudad.

Nunca voy a entender por completo las extrañas motivaciones que algunas personas tienen al momento de hacer cosas supuestamente "bien intencionadas" y que a la larga terminan siendo dañinas. Puede que haya cierta explicación en la búsqueda que estas personas tienen de satisfacer ciertas carencias, afectivas o sociales, que los impulsan a mostrar una falsa imagen ante quienes les rodean, y son estos mismos individuos que les rodean quienes alimentan esa imagen distorsionada. El efecto producido es una falsa idea de la realidad, tal como en la "Alegoría de la Caverna" de Platón (sorry el que no la cacha, pero no todo es webeo en la vida)

El escepticismo es una corriente filosófica basada en la duda y que asegura que absolutamente TODO es subjetivo. Eso es lo que más me gusta. Saber que existe un fundamento filosófico para mi modo de ver las cosas. Los escépticos creían que la paz del alma estaba dada por la suspensión del juicio (epojé), es decir, no emitir juicios, sino exclusivamente opiniones. Pero ojo, aprender a suspender el juicio, al menos provisoriamente, no implica abstenerse de pronunciarse u opinar posteriormente.

Evitar sentirse perturbado por las acciones que "bien intencionadamente" realizan las personas a tu alrededor y que de alguna manera, conciente o inconciente, te cagan la vida, es una práctica complicada. Alcanzar tal grado de imperturbabilidad (ó adiaphora) es casi una habilidad zen, digna de monjes budistas. Pero no por eso no se va a intentar, o al menos, practicarla en un grado elemental.

Aléjate de aquello que te hace daño, es un sabio consejo, sobre todo si reemplazamos "aquello" por "aquellos". Dime con quien andas y te diré quien eres, un sabio refrán; y el escepticismo una sana manera de vivir la vida.

Por ahora, sólo quedo en divagaciones, pero también suspendo momentáneamente el juicio para evitar confrontaciones, hasta que llegue el momento de pronunciarme.

Mientras tanto, que vuelen los volantines.

11 comentarios:

Anónimo dijo...

Es verdad, la desilusión siempre va acompañada de lamentaciones y sufrimientos y eso hace que nos pongamos más fríos y empecemos, sin darnos cuenta, a construir un muro cada vez más grande. Pienso que la desilusión se produce porque muchas veces tendemos a idealizar las situaciones o a las personas, y es ahí donde la caida es grande.
Dejar de creer tampoco es sano. Si dejamos de creer en nosotros, sería imposible cumplir nuestros sueños; y si dejamos de creer en las personas, no tendríamos amigos de verdad.
Creo que solo hay que aprender a abrir bien los ojos y saber a quien/es les abrimos las puertas de nuestro corazón y les entregamos nuestra confianza.
Hay que aprender a vivir la REALIDAD y no a vivir de ILUSIONES, pero sin dejar de CREER, SOÑAR y CONFIAR!!!

Bss,

Lau.-

Anónimo dijo...

Uffffff.....
si supieras como entiendo
todo lo que escribes....

y creo que al fin logre
hacer lo correcto.....
``alejarme de la gente que me hace daño´´.... a veces no es facilll, pero se lograaaa..

pucha mil besos para tii

y cualquier cosa que necesites
ute sabe......
kissssssss

Chilotita dijo...

esta bien raro lo que escribes, pero no es mejor creer, alguien una vez me dijo,hablando de Dios:
si no crees,te vas al infierno.
si crees,te vas al cielo.
el creer ¿ a quien le hace daño? si no crees eres una persona vacia.
la verdad no se que pensar y al igual que tu solo me queda divagar y seguir pensando y emitiendo opiniones y no juicios.

SiN auReoLa dijo...

Me encanta el escepticismo por que no sólo podría ser el camino de la negación a la creencia,sino, por que da cabida a la búsqueda de las explicaciones racionales.
Tal cual tú lo expones, el escepticismo puede ser utilizado frente a personas, situaciones, sentimientos, etc y no simplemente a ideas religiosas como mucha gente piensa.
"Para desilusionarse debes hacerte ilusiones" bajo esta afirmación cualquiera podría concluir que la solución es simple... basta con no pasarse mas rollos de los que puedas manejar... pero la verdad es que no es tan fácil y concuerdo con Laura en que no es sano dejar de soñar, de creer en la bondad de quienes te rodean y tener confianza en que los volantines podrían ser aquellos Selenitas o Ganimedianos que nos vienen a sacar de este retrete mal oliente.

Chilotita dijo...

no es tan solo a ideas religiosas que tu puedes optar por creer como dije anteriormente, sino mas bien muchas personas lo toman como filosofia de vida, ejemplo por que no creer en los duendes, que daño te hace o hace a los demás, a eso me refiero con mi comentario, creer o no creer que conviene mas?

Anónimo dijo...

Yo mas que dejar de creer, o ponerme exceptico pienso...que la experiencia nos va pavimentando el camino siempre..sin darnos cuenta, aprendemos de las caidas..sin quererlo, vamos seleccionando las personas que nos rodean y cada vez mas minuciosos..es verdad que caerse con situaciones y/o personas, es una verdadera lata y una pena..pero por ahi dicen, uno nunca termina de conocer a la gente verdad?..Hay gente que con tanta desilucion, empieza a convertirse en una persona introvertida en algunos aspectos..yo con el tiempo, he ido sin quererlo, reservandome muchas cosas, pero nunca he perdido la fe de encontrar buenos corazones..tengo una amiga, que por confiada le han hecho varias muy feas, de gente de su total confianza..y eso, debe doler muchisimo, por eso lo importante es que ahi, entre la experiencia de lo vivido, y no volver a cometer los mismos errores...

Y a proposito de volantines iluminados por las luces de la ciudad...SEW NOS VIENE SEPTIEMBREEEE::SE VIENE SE VIENE ;...jAJja tiquitiqui tiiii

Anónimo dijo...

Entiendo demasiado lo que dijo Manu, cuando traicionan tu confianza sientes que todo se viene abajo; pero como experiencia personal, si yo hubiese dejado de creer en las personas, no tendria a mi lado los AMIGOS INCONDICIONALES que tengo.
Por eso como dije antes, a seguir CREYENDO y SOÑANDO!!!!!!
Pero ojo, soñar y creer en la REALIDAD!!!

Bss,

Lau.-

Anónimo dijo...

Mis acciones son bienintencionadas...pero hacen daño!!!!!jaajajaj
k hago???

cARRETIEMOSSS PUESSS
Y olvidémonos de los jugos de la vida!!!!!!!!

BEsos

Anónimo dijo...
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Anónimo dijo...

Upsss...

Anónimo dijo...

puchisss...
Quien es Ruben?
Quien es Raúl?
Quien es Eliel?
jajajajaajajajaj

igual buena la película..
ya bueno besitoss
que estes bien
hablamos

kisssssss